Por muy preparado que vayas no podrás saber que vas a encontrar. El sábado no pudimos tener mejor recibimiento por el camino que nos lleva a la Loma, la montaña en medio del verde y el morado de la piedra estaba tapizada por pequeños puntitos de color blanco que muy temprano y tímidamente se van abriendo a un maravilloso día soleado. Son unas hermosas orquídeas, especie endémica de esta zona llamada Sobralia variación Alba (por el centro amarillo) que florece una vez al año. En la tarde de regreso ya estaban totalmente abiertas y esplendorosas, si pasas al siguiente día no las encontraras porque es flor de un día.
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